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Ciberfeminismo y Tecnofeminismo*

¿Qué es el ciberfeminismo?  Es un término acuñado en 1994 por la filósofa Sadie Plant, para describir el trabajo de feministas interesadas en teorizar, criticar y explotar internet, el ciberespacio y las tecnologías de medios en general.

Qué es el ciberfeminismo

Las tecnologías de comunicación e información (o sea internet) no son neutrales, en términos de género, son profundamente masculinas en su configuración y representación. Sin embargo, las tecnologías de comunicación podrían ser una herramienta vital para el desmantelamiento del patriarcado, la pregunta es ¿cómo? 

El ciberfeminismo es una teoría feminista que surgió en la década de los noventa cuando internet comenzaba a redefinir el mundo. Para las ciberfeministas, internet era una plataforma inédita de pensamiento libre con potencial de cambiar la manera en que las mujeres eran percibidas. Sadie Plant y una colectiva de artistas en Australia llamada VNS son las matriarcas de esta teoría que surgió de un breve movimiento artístico y utópico.

Plant, argumenta que las mujeres son naturalmente aptas para usar internet, porque las mujeres e internet son de naturaleza similar, ambas según Plant, “son sistemas no lineales y autorreplicantes que se ocupan de hacer conexiones”. 

Plant planteó que es importante ver las computadoras e internet como lugares para que las mujeres se involucren en nuevas formas de trabajo y juego. Un lugar donde las mujeres se sientan liberadas de las limitaciones tradicionales y sean capaces de experimentar con la identidad y obtener nuevas vías para reclamar poder y autoridad. Su visión del ciberespacio es como un espacio familiar y acogedor para las mujeres, donde pueden y deben aprovechar las oportunidades para avanzar y desafiar la autoridad masculina. 

 El ciberfeminismo sostiene que la tecnología no es neutral en términos de género, sino que es profundamente masculina en su configuración y representación. Esta premisa se encuentra acompañada de una mirada optimista sobre la oportunidad de agenciamiento de las mujeres en las tecnologías de la información y comunicación a través de la participación crítica.  

Las aportaciones ciberfeministas fueron cruciales para restaurar el protagonismo de las mujeres en el desarrollo de las tecnologías de la información y comunicación. Más de un siglo después que Ada Lovelace escribió en papel los primeros programas para ordenadores (1815), estas mujeres buscaban reclamar su lugar en la tecnología que numerosas otras habían ayudado a crear a través del tiempo pero nunca fueron reconocidas. 

El reconocimiento de la labor de mujeres no fue el único resultado del movimiento. Pues este invitaba a mujeres a que participaran críticamente en el ciberespacio, también a teorizar, criticar y aprovechar la tecnología emergente. 
La relación entre genero y tecnología se comienza a replantear más puntualmente en una teoría posterior conocida como tecnofeminismo. La sociologa Judy Wajcman acuño el termino en un libro donde analiza las distintas maneras en que las tecnologías tienen género, tanto en su diseño como en su utilización.

Qué es el tecnofeminosmo

¿Qué es el tecnofeminismo? El término creado por Judy Wajcman (2004) implica la combinación del feminismo con los estudios sociales de la tecnología. Para las tecnofeministas, la tecnología se constituye como un producto tecnológico, como causa y consecuencia a la vez de las relaciones de género. Judy Wajcman plantea que los avances tecnocientíficos están transformando radicalmente la relación mujer-máquina, analiza las distintas maneras en que las tecnologías tienen género, tanto en su diseño como en su utilización. 

El tecnofeminismo se aproxima a las TIC con más conciencia sobre los viejos y nuevos problemas de discriminación de las mujeres en las tecnologías.  Según Wajcman la desvinculación de las mujeres de la tecnología también supone una desvinculación de los ámbitos de poder.  La investigación tecnofeminista se ha dedicado a analizar el desarrollo de tecnologías concretas en cada una de sus fases y teniendo en cuenta los elementos técnicos y de género que las conforman y que se construyen mutuamente. Así, para el tecnofeminismo, la política feminista y la participación de las mujeres en el diseño de las TIC es esencial.  

*NB: Los ciberfeminismos y tecnofeminismos por sus reclamos y reivindicaciones interseccionales por deconstruir los binarios y las relaciones de poder tecnopatriarcales incluyen a las mujeres y a toda la comunidad LGBTTIQ+. El ciberfeminismo es transciberfeminismo; el tecnofeminismo es tecnotransfeminismo.

Referencias: 

Vergés Bosch, Núria, Teorías Feministas de la Tecnología: Evolución y principales debates

Wajcman, Judith, El tecnofeminismo

CDHCM, Violencia Digital contra las mujeres (2021)

El dilema de sobreacompañar

Texto: NM; Ilustraciones: PP  

Cuando nos encontramos con una persona en situación de crisis, pueden activarse ciertos mecanismos que, en vez de acompañar, perjudican. Muchas veces creemos que estamos ayudando pero, en realidad, lo que sucede es que sobreacompañamos. Aunque tengamos las mejores intenciones, el sobreacompañamiento provoca efectos negativos en la  de las acompañantes salud mental y en la de quienes se acercan a nosotras para recibir apoyo.

El sobre acompañamiento puede explicarse como una forma de vincularnos con otra persona y en vez de acompañarle buscamos rescatarle o resolver sus problemas.

Para empezar, ¿qué es el sobre acompañamiento? Podría explicarse como una forma de vincularnos con otra persona que, en vez de acompañarles, buscamos rescatarles o resolver sus problemas. Es la acción de imponer las respuestas, sin permitirles explorar las suyas y subestimando su proceso de autorregulación, es decir, la sabiduría que llevan basada en su experiencia y contexto.


En el sentido más adultocrático, sobre acompañar es infantilizar a la persona en crisis, como a un ser inferior que no puede por sí misme. Sin embargo, cuando una persona pide ayuda, hay un indicio de que quiere tomar el camino a sentirse mejor y está en búsqueda de la puerta de la vida. De alguna manera, cuando reconoce que necesita ayuda, esa persona ya tomó sus muletas para caminar y pide que le acompañemos en ese andar. Sin embargo, si hacemos demasiado fuerza por ella, podría desvanecerse y dejar de sostenerse a sí misma.


¿Cómo nos afecta? En realidad, el impulso de solucionar sus problemas puede convertirse, sin quererlo, en el acto de quitarle sus muletas e imponer soluciones que, aunque en nuestra experiencia son válidas, pueden no serlo para les otres. Esta acción no sólo perjudica a la persona que necesita acompañamiento, sino que también pone en riesgo nuestra propia tranquilidad mental y emocional y trae excesiva preocupación.


Entre más grave sea el caso, más fácil es que surja el sobre acompañamiento. Pero en el intento de rescatar, al sobre-acompañar, estamos subestimando a la persona, colocándola en una posición inferior a la persona acompañante y dejando de lado su auto responsabilidad. Desde la perspectiva feminista, en el acompañamiento no hay jerarquía, sino que las personas son iguales en una relación horizontal.


Esa relación horizontal es la que nutre la confianza necesaria para el acompañamiento feminista. Esta confianza “va creciendo como una enredadera con sus formas serpenteantes y sorpresivas, pero firmes. Así también, es una confianza que abraza la autonomía de las mujeres” (La Revuelta, 2018).

Reproducir la horizontalidad en los vínculos es lo que nos permitirá sanar las heridas de forma colectiva, sin reproducir jerarquías. ¿Cómo evitarlo? Por eso, a la hora de acompañar, es útil preguntar “¿Cómo puedo ayudarte?”, en vez de suponer lo que la otra persona necesita. Así es cómo podemos caminar junto a ella por su propio sendero de la vida y no imponerle otro que sienta ajeno y pueda abandonar rápidamente. Ten en cuenta siempre que acompañar no es resolver.

Si sientes el impulso de hacerlo, busca aire hasta volver a la relación horizontal. Confía en la persona y transmítelo, eso aumentará su propia confianza. Esto puede parecer extraño porque, a su manera, en el acompañamiento se ponen a prueba prácticas y ejercicios de solidaridad de un “ser humanas de otra manera que como lo hemos sido hasta ahora” (Laboratorio Nacional Diversidades, 2018).


Ser humanas de otra manera que como lo hemos sido hasta ahora,. Cita del Laboratorio Nacional de Diversidades.

Escucha con todos los sentidos y, si crees que el caso se ha tornado demasiado grave, haz la pregunta mágica: “¿Crees que eres un peligro para ti misme o para otras personas?”. Confía en la respuesta y, de ser necesario, acompaña a esa persona a buscar ayuda profesional.

No olvides que:

  1. Cuando una persona pide ayuda, ya tiene sus muletas.
  1. Si queremos acompañar, no supongamos. En su lugar, preguntemos.
  1. El acompañamiento acompaña, no soluciona.
  1. Evitemos subestimar a la persona que acompañamos.

Encontrarnos en acompañamiento no sólo es un quehacer feminista, sino que es sostén colectivo, que nos comparte saberes de otras personas y nos hace concientes de la fuerza de la diversidad. Sólo el acompañamiento generoso, solidario y, sobre todo, horizontal, puede profundizar esta fuerza y hacerla flexible y accesible a todo quien la necesite.

La vida digital es vida real

Pasamos gran parte de nuestro día cambiando de pantalla en pantalla, muchas de las actividades de nuestra cotidianidad se realizan a través de internet.

Se tiende a creer que lo que pasa en Internet o cómo nos relacionamos con los medios digitales carece de realidad, que lo que ahí pasa pertenece al mundo de la ficción. Sin embargo nuestra vida digital y nuestra vida física, son muy difíciles de separar. 

Pasamos gran parte de nuestro día cambiando de pantalla en pantalla, muchas de las actividades de nuestra cotidianidad se realizan a través de Internet, desde comunicarnos con nuestras amigues, familia, trabajo, entretenimiento, pagos de servicios etc, nuestra vida está atravesada por el mundo digital. 


Lo que pasa en la vida digital se relaciona con lo que pasa en nuestra vida física y viceversa, se retroalimentan todo el tiempo. Un ejemplo de esto se puede ver en los efectos de la violencia digital; la diferenciación de la vida real y la vida digital hace creer que los daños de las violencias que suceden en línea son menos graves que las violencias que se cometen en el mundo físico…nada más lejano a la realidad.  

Los daños de la violencia digital son bastante significativos, en la cuerpa, en la vida, en la forma de expresarse y en el ejercicio de nuestros derechos. En la mayoría de los casos, los efectos de estas violencias repercuten en la vida física. 


En ese sentido, si pensamos el autocuidado como parte de nuestra vida física es importante pensar en incluir la dimensión digital, para esto te recomendamos: 

  • Elimina las aplicaciones que no necesitas o de las que deseas tomar un descanso.
  • Elimina fotos o videos qué no te gusten o crees que ya no necesitas. 
  • Asigna un tiempo para eliminar de tus contactos, amigos, seguidores que no conoces o con los que no te sientas cómoda con la idea de qué ven tus fotos o información.  
  • Deja de seguir páginas o perfiles que comparten contenido violento, o que no son de tu agrado. 
  • Desactiva las notificaciones de las aplicaciones para qué no interfieran con tus momentos de tranquilidad. 

¡Tenemos una cuerpa digital que merece ser cuidado con amor!

La diferenciación de la vida real y la vida digital hace creer que los daños de las violencias que suceden en línea son menos graves que las violencias que se cometen en el mundo físico.

Cuidados en internet

Cómo se cuidan de la violencia en internet las mujeres y la Comunidad LGBTTIQ+

Internet es un espacio dónde se encuentran y fomentan las comunidades en línea, se accede a la educación. Un sitio en el que puedes organizarte con otras personas e involucrarte en política, aprender y entretenerte. Sin embargo, Internet no funciona igual para las mujeres, mujeres jóvenes, niñas y para la comunidad LGBTTIQ+.

Las mujeres y niñas jóvenes experimentan violencia debido al mayor uso de Internet y a la digitalización forzada a la que nos enfrentamos en contexto de crisis sanitaria, muchos hábitos machistas de la vida offline pasaron a online casi directamente. Para los y los jóvenes LGBTTIQ+, las mujeres jóvenes racializadas, indígenas y precarizadas en todo el mundo, el impacto del abuso de género se amplifica cuando también experimentan ataques basados ​​en su identidad, orientación sexual, identidad de género, raza o etnia.

Existe un desconocimiento de las políticas y recursos que las redes sociales brindan para poder proteger las cuentas y dispositivos. Además que estas no son suficientes para responder a las violencias de género y ataques siempre cambiantes.

Aquellas personas que activamente practican formas de protegerse, la seguridad y privacidad en sus cuentas de redes sociales, invierten tiempo y recursos entendiendo o las configuraciones y recursos disponibles. Estas características suelen ser diferentes en cada plataforma y carecen de accesibilidad, empatía y verdadera sensibilidad con respecto a lo que pasa en situaciones concretas de abuso o violencias.

Adicionalmente, las limitaciones en las respuestas que las plataformas ofrecen frente a violencias online han llevado a que las mujeres y la comunidad LGBTTIQ+ generen sus propias estrategias autónomas y recursos para protegerse de las violencias en Internet. 

Si bien las plataformas ofrecen la opción de silenciar, desactivar los comentarios, bloquear o eliminar amistades, un agresor puede ver si han sido bloqueados o eliminados. Estas opciones no resultan ser  tan útiles en contextos en los que se podría conocer al agresor y convivir con él.

Como respuesta, comunidades, activistas y grupas LGBTTIQ+ comparten listas de cuentas que generan discursos de odio en las plataformas para ayudar a denunciar los contenidos abusivos y de odio. Otras personas cambian sus nombres de usuarios en Internet y le agregan emojis o caracteres especiales para que a los abusadores les resulte más difícil encontrar sus cuentas.

Y tu, cómo te proteges en internet

¿Tienes alguna estrategia junto con tus amigues para sentirte más segure en Internet?¿Qué les dirías a las plataformas de redes sociales para que aborden mejor este problema?


Referencias:
How online gender based violence affects the safety of young women and girls

El acoso contra la comunidad LGBTIQ+ y el derecho a la paz: implicaciones educativas en Latinoamérica

Out online experiences LGBT youth internet

#28S Día de Acción Global

Por un aborto legal y seguro, 28 de septiembre el día de acción global

En esta jornada de mundial por la despenalización y legalización del aborto en América Latina y el Caribe, te compartimos algunas buenas prácticas para tu salud mental y seguridad digital:


✊ Si marchas en la calle…

1) Ten a mano agua, tu identificación personal, celular cargado y zapatos cómodos para marchar.

2) Comparte con une compañere designade tu ubicación y tus datos personales, para que pueda rastrearte en caso de detención o emergencia.

3) Considera en tu ruta el hospital más cercano, ten presente un espacio seguro para reunirte con tus compañeres y consensúa una posible vía de evacuación.


✊ Si luchas en las redes…

1) Considera los grupos o personas que podrían atacarte en internet en contra de la lucha feminista. 

2) Antes de compartir hashtags masivos, revisa tus cuentas para ver qué información personal está guardada allí, limpialas de tus datos personales y utiliza contraseñas seguras (largas, con caracteres especiales y únicas).

3) Identifica colectivas feministas que puedan apoyarte en caso de emergencia. Si te sientes mal o en peligro, acude a elles para acompañarnos en colectivo.

📲 Por último, agenda este número en Whatsapp/Telegram/Signal: +52155-8171-1117 Somos #lineadeayuda para ti que documentas, investigas, reporteas, resistes, peleas, acompañas, combates y sufres violencias en línea. 

Abuso, Acoso y Violencia en línea

Investigación: LMR / Ilustraciones: PP

Abuso, acoso y violencia en línea

Las mujeres y la comunidad LGBTTIQ+ tienen más probabilidad de enfrentar abuso, acoso y violencia en línea. El machismo, la discriminación y otras violencias estructurales encontraron otra vía para expresarse, el espacio digital.


Según varias investigaciones en América Latina el acoso, abuso y violencia en Internet tiene efectos significativos en todos los aspectos de la vida de las personas que las enfrentan. La autocensura, el no sentirse segure de brindar su opinión en Internet o callar su voz para denunciar vulneraciones a sus derechos. Estas afectaciones a la libertad de expresión son algunas de las consecuencias claras de las violencias en línea, pues afectan a la participación de mujeres y personas LGBTTIQ+ en la vida pública. 


El abuso, el acoso y la violencia en línea afectan no solo la salud mental sino también la fuente de ingresos económicos de la población que las enfrenta,  en ese sentido, según la UNESCO (2020) de 714 periodistas mujeres encuestadas, 26% mencionó enfrentar impactos psicológicos de la violencia en Internet, el 17% se sintieron más inseguras como resultado de la violencia en línea, 12% recurrió a ayuda psicológica o profesional en general, 11% perdió su trabajo por el cuadro psicológico diagnosticado, 10% encontró afectada su reputación profesional y 4% perdió el trabajo por temor a la violencia física a partir de lo digital. 


En el ámbito político, la violencia ejercida contra votantes mujeres y candidatas en Internet debilita además el ejercicio de derechos fundamentales y libertades democráticas.  Entre algunas de las violencias qué enfrenta este grupo están las campañas de desprestigio (destinadas a desacreditar a la persona atacada) y difusión de información falsa.  


Las violencias en línea representan una continuidad de la violencia que enfrentan las mujeres y personas LGBTTIQ+ fuera de ella y muchos de nuestros países carecen de estrategias de prevención y respuestas concretas frente a este problema.

Efectos de la violencia en línea, la autocensura, no sentirse segure de opinar en línea, callar su voz y no denunciar


¿Qué hacer frente este panorama que describimos?

Cuéntanos qué estrategias aplicar para enfrentar los abusos, el acoso y la violencia en línea. Te escuchamos.


Referencias:

Informe violencia digital de género contra mujeres en Venezuela (Jun2021)

Violencia digital de género contra las mujeres en Venezuela

Violencia Política de género en Internet, El Sur, 2020

Violencia-Digital-TEDIC (2021)

Recuperar la confianza

Texto: LMR/LOP | Imágenes: PP

¿Valgo por mí misma no tengo valor por lo que produzco, lo que aguanto, lo que sacrifico, lo que dejo de hacer para que otres estén bien?

Durante dos semanas Vita Activa hizo un alto para recuperarse, recargar energía y practicar ejercicios de auto-ayuda, auto-cuidado y desintonxicación digital.

Recuperar la confianza

¿Por qué lo hacemos?

Porque nuestra valía está relacionada directamente con el poder de detenernos, el poder poner nuestras necesidades en primer plano, el ser nuestra prioridad primero y en poder pensar en cómo comenzar a cambiar nuestro entorno para que todas podamos operar de manera más respetuosa de nuestras necesidades y nuestra salud mental. Tenemos que proteger nuestro cuerpo y nuestras mentes.

Valía o autoestima

La valía y la autoestima son dos términos relacionados que a menudo se usan indistintamente. Tener un sentido de autoestima significa que te valoras a ti misma, y tener un sentido de valía significa que eres digna -a los ojos del entorno en el que te encuentras. Las diferencias entre los dos son tan pequeñas como para que no logremos distinguirlas. La clave está en la palabra dignidad. Todas tenemos, merecemos y podemos derivar nuestro valor de nosotras mismas. Los derechos humanos son los derechos de todas y de todes.

“La autoestima es lo que pensamos, sentimos y creemos sobre nosotras mismas. La autoestima es reconocer ‘Soy más grande que todas esas cosas’. Es un conocimiento profundo de que soy valiose, que soy adorable, necesario para esta vida y de un valor incomprensible”, Dra. Cristina Hibbert(2013).

PAUSA. Nuestra valía está relacionada directamente con el poder de detenernos, el poder poner nuestras necesidades en primer plano, el ser nuestra prioridad, primero.

Autoestima o autoconfianza

La confianza en una misma no es una evaluación general, sino un sentimiento de confianza y competencia en áreas más específicas. Por ejemplo, puedes tener una gran autoestima pero poca confianza en tí misma cuando se trata de deportes extremos, ciertas materias en la escuela o en tu capacidad para hablar un nuevo idioma (Roberts, 2012).

No es necesario tener un alto sentido de autoconfianza en una misma en cada área de la vida; naturalmente, hay algunas cosas en las que simplemente no serás muy buena y otras en las que sobresaldrás. Lo importante es tener confianza en tí misma en las actividades de tu vida que te importan y un alto sentido de autoestima en general por la manera como haces las cosas. 

Repite estas frases cuando sientas que tu autoconfianza necesita un empujoncito:

Yo creo en mi misma;

Soy tan valiosa como otras personas;

Estoy orgullosa de mis logros y acepto mis fracasos;

Me merezco todas las cosas buenas que me pasan. 

Me respeto a mí misma;

Estoy feliz de ser yo.

MANTRA. Valgo por mi misma, no tengo valor por lo que produzco, lo que aguanto, lo que sacrifico, lo que dejo de hacer para que otras estén bien.

Te proponemos que estas semanas que vienen realices estos dos ejercicios y que nos cuentes cómo te vas sintiendo en redes FB/TW/IG @VitaActivaOrg o por correo electrónico en apoyo@vita-activa.org

Referencias:

Self Worth

Pedir ayuda

Investigación: LMR | Diseño: PP

¿Por qué es tan difícil pedir ayuda?


Muchas veces intentamos manejar las cosas por nuestra cuenta y evitamos pedir ayuda, aunque sea difícil aceptarlo, no siempre es posible hacer y manejar cada situación por nuestra cuenta. A veces debemos admitir que no podemos hacerlo todo y recordar qué  somos humanas después de todo. 


¿Por qué es tan difícil pedir ayuda? 


Pedir ayuda puede ser difícil, nos hace sentir incómodes porque requiere ceder el control a otra persona. Otro temor es ser percibide como necesitade. No queremos parecer incompetentes. También tenemos miedo a ser rechazades cuando pedimos ayuda. Muchas personas creemos que está mal perder el tiempo de otra persona pidiéndole ayuda o pidiéndole qué nos escuche.

A veces debemos admitir que no podemos hacerlo todo y recordar qué somos humanas después de todo.

¿Qué puedo ganar pidiendo ayuda?

  • Cumplir con mis objetivos en lugar de quedarme sin avanza. Cuando no nos sentimos segures de nuestro próximo paso, pedir ayuda nos apoya a sentirnos aliviades porque tenemos más confianza en lo que tenemos qué hacer.    
  • Trabajar en equipo. Al pedir ayuda le damos la oportunidad a la otra persona de que comparta su experiencia con nosotres.   
  • Reforzar mis lazos con esa persona al pedir ayuda. El mensaje que le doy es que admiro su experiencia o habilidades. 
  • Conectar con mi círculo de apoyo, mi grupo, mi manada. 
  • Enraizar mi resiliencia. Pedir ayuda nos permite rodearnos de personas que pueden hacernos sentir bien y nos facilita superar los contratiempos y crecer.
  • Mejorar mi salud mental. Sentirme conectade con las otras personas y aprender cosas nuevas me hace sentir bien. 
  • Pedir ayuda puede hacerte sentir agradecide. Sentir y expresar gratitud nos hace muy bien.

Referencias:

4 tips to effectively ask for help and get a yes

Why its good to ask for help

Derecho a ser mi prioridad

Texto LMR | Ilustraciones PP

Tenemos que proteger nuestras mentes.y nuestros cuerpos. Cita de Simone Biles


En los últimos dos meses dos deportistas profesionales; Naomi Osaka y Simone Biles pusieron el tema de la importancia de la salud mental sobre la mesa. Simon Biles es considerada la mejor gimnasta de la historia y decidió no seguir participando en los juegos olímpicos, porque quería concentrarse en su salud mental. Naomi Osaka es la tenista número dos del mundo, tomó la decisión de retirarse de un torneo de tenis hace dos meses atrás por la misma razón. 


Simone Biles y Naomi Osaka nos recordaron que: 

  • Podemos decir no, aunque estemos frente a una gran oportunidad si no nos sentimos en condiciones para hacerlo.  
  • Podemos decir no a cosas que nos causan malestar.
  • Tenemos derecho a decir no, aunque existan muchas expectativas sobre nosotras y se espera que actuemos de alguna manera en específico. 
  • Ser nuestra prioridad significa proteger nuestra mente y nuestros cuerpos aunque todo el mundo espere lo contrario. 
  • Se puede hacer una pausa, o muchas pausas, detenerse está bien.  
  • Reconocer que necesitamos espacio para sanar es una medida transgresora de autocuidado porque nadie espera que lo hagamos. 
  • Somos humanes, no somos perfectes ni somos robots. 
  • Nuestros sentires son más importantes que todas las expectativas que ponen sobre nosotres.  
  • No tenemos por qué complacer a los demás si no queremos. 
  • Tenemos derecho a priorizar nuestro bienestar.
  • Nuestra salud mental debe ser tratada con prioridad. Es urgente, hoy y siempre. 

Tenemos derecho a priorizar nuestro bienestar. Nuestra salud mental debe ser tratada como prioridad. Es urgente, hoy y siempre.

Las trampas de la productividad

Investigación y Texto LMR | Ilustraciones PP

Las trampas de la productividad

“Tu productividad no define tu valor”.

El concepto de productividad 

La productividad en un mundo capitalista generalmente se refiere a la capacidad de una persona, equipo u organización para trabajar de manera eficiente dentro de ese tiempo con el fin de maximizar la producción.

¿Cómo impacta nuestra vida este concepto?

El concepto de productividad nos hace creer que nuestro valor está determinado por todas las obligaciones que tenemos o las tareas y plazos que cumplimos.  Nos da hace pensar que quienes somos depende de nuestros logros, lo que compramos o los títulos que obtenemos. Ser productive es sinónimo de tener éxito. Creemos que si trabajamos lo suficiente, nos sucederán cosas buenas. Esto nos mantiene agotades con largas listas de cosas por hacer y sin tiempo para descansar. 

¿Cómo impacta este concepto nuestra salud mental?

No tener tiempo para descansar y tener siempre la agenda llena nos distrae de lo que está pasando con nuestras emociones y nuestro cuerpo. ¿Me encuentro bien?, ¿Cómo me hace sentir todo el ajetreo en mi vida? 
Siempre estar ocupade nos hace posponer el cuidado de nosotres mismes. Muchas veces se vuelve más fácil enfocarse en tareas, proyectos, trabajos que en nuestras emociones, pero bajar la velocidad está permitido, detenernos y preguntarnos:

¿Cómo estoy? ¿Cómo me siento hoy? ¿Qué necesito?

Tu productividad no define tu valor

Consejos para no caer en la trampa de la productividad

  • Reduce la velocidad, el mundo no se termina si descansas unas horas.
  • Anota en tu agenda los días u horas que dedicarás al descanso y al autocuidado. 
  • Las personas que trabajan demasiado tienen un riesgo significativamente mayor de depresión y ansiedad, no tengas miedo a decir “No” a nuevos proyectos, las oportunidades vuelven. (Si no es ahora sera mañana…🎶🎶🎶)
  • Está comprobado que el descanso y ocio fomentan la creatividad que te ayudarán a realizar tus tareas laborales de forma más amena.
  • Tomar descansos durante períodos de crisis social es una forma poderosa de autocuidado y de rebeldía.

Referencias:  

Your worth is not measured by your productivity

Productivity